Haciéndome eco del visionado de nuestro hemiciclo, prácticamente vacío las más de las sesiones y de las constantes alusiones del señor Rufián a la incomparecencia continuada del señor Abascal, diputado que, por su historial, parece sufrir cierta "alergia laboral" quisiera expresar algunos principios:
Entretots
Todo trabajador debe justificar su ausencia en su puesto de trabajo, so pena de rebaja salarial o medidas peores. Si la "función pública" de la que se llenan la boca nuestros políticos es un trabajo más, ¿cómo justifican sus ausencias? No negaré que algunos deben compatibilizar este con eventos institucionales, pero, ¿y los demás?
En la misma tesitura pongo sus derechos/obligaciones laborales: tanto cobras, tanto cotizas, sea a la Hacienda Pública o a la Seguridad Social, asimismo, prestaciones equiparables al tiempo y monto cotizado, ni más, ni menos; si te has hecho acreedor a alguna prestación, paro incluido, que se ataña a lo cotizado.
Y ya, menos importante, pero no menos agraviante: si quieres desayunar en el bar (del Congreso) paga lo que paga cualquier españolito en las mismas condiciones o llévate el bocata de casa.
Reconozco lo utópico de todo lo expresado pero no la pregunta: ¿Políticos o élites?