Los residentes en las Islas Canarias, al igual que los empadronados en las Baleares y Ceuta gozan del beneficio insular consistente en la bonificación del 75% en el precio base del billete de vuelo, así como en la maleta-equipaje. Ese descuento resulta aplicable en los vuelos a la Península. Basta para ello con marcar en la casilla correspondiente al efectuar la reserva de vuelo.

Pues bien, resulta que uno de mis hermanos, residente en La Laguna (Tenerife), por descuido involuntario no marcó la casilla y le facturaron como si se tratase de un usuario no residente. Tras percatarse de la omisión, efectuó la pertinente reclamación de la devolución del 75% a la compañía Vueling y esta, incomprensiblemente, solo atendió a la devolución de lo tocante al vuelo, pero no a la maleta.

¿Acaso se pretende que los viajeros residentes en las islas afortunadas se desplacen a la Península con lo puesto? Aparte de ser la respuesta incoherente y contraria al derecho y a la legislación vigente, se antoja antihigiénica. Cabe recordar que, en caso de verse compelido el usuario afectado a acudir al juzgado, le sería de imposición a Vueling una multa, a guisa de corrección disciplinaria, por actuar conculcando las reglas de la buena fe procesal, que podría llegar a alcanzar los 6.000 euros si consideramos el daño moral adicional, tiempo invertido en elaborar la reclamación y los transtornos y molestías irrogados.