Mientras Díaz Ayuso sostenía hace unos días que «España, en este mismo instante, debe dar cobijo a Edmundo González, que está siendo perseguido», el Gobierno español trabajaba con sigilo para conseguirlo, tal como Edmundo González había solicitado. Y España, país gobernado como todo el mundo sabe por chavistas bolivarianos, es el país elegido por Edmundo González para su exilio.
Entretots
González -ahora traidor, insinúa el PP al abandonar su país-, y 125.000 compatriotas y presos políticos -más de 100 liberados gracias a Zapatero- que durante el Gobierno del presidente Sánchez han conseguido su asilo aquí -apenas un centenar, en los mandatos de Rajoy-.
El PP se vuelve a liar en su política de crispación y añade un nuevo giro de guion: ahora le parece mal y contradice hasta al propio Edmundo González, sosteniendo que Maduro sale reforzado. Es la política del "dime qué dices que me opongo".
Al PP, indudablemente, Venezuela y los venezolanos le importan poco, solo los usan como arma política de confrontación para lograr votos, porque sus votantes se lo compran.