Como trabajadora, celebro que por fin se esté hablando seriamente de reducir la jornada laboral a 37,5 horas. Porque el tiempo también es salario. Tener más horas personales para poder descansar, estar con la familia o, simplemente disfrutar no es un lujo, es una necesidad.
Entretots
Trabajar menos no significa rendir menos. Al contrario, fomentará la productividad de todos nosotros y, sobre todo, ayudará a reducir la carga mental que arrastramos muchas personas cada día.
Esta medida no lo cambiará todo, pero es un gran avance en el mundo laboral. Un avance hacia el bienestar real de las personas.