Se dice que somos lo que comemos. Queda clara entonces la importancia de una buena alimentación como parte indispensable para poder gozar de una buena salud. Del mismo modo que consideramos innegociable tener derecho a la educación o a la sanidad, me parece igualmente innegociable el derecho a poder acceder a una alimentación saludable y variada con independencia de la edad, la clase social, etc.
Entretots
En los últimos años ha habido un aumento desorbitado de precios en los alimentos. Todos lo hemos notado al ir a hacer la compra en el supermercado. Y, como tantas cosas, esto ha impactado más aún en los menos pudientes. Creo que es importante apostar decididamente por políticas públicas que aseguren que todos los niños puedan acceder a una alimentación saludable tanto en la escuela como fuera de ella; que nuestras personas más mayores, a menudo invisibilizadas, no pasen penurias en relación con la comida; y que en todos los barrios se pueda acceder no solo a productos procesados, sino también frescos, y a precios que no se dejen por el camino a tanta gente.