El otro día, una lectora contaba en EL PERIÓDICO su experiencia en un bar en el que estaba cenando y en el que coincidió con un vapeador, lo que la llevo a cuestionarse sobre la ley al respecto. Yo llevo vapeando más de tres años, pero, efectivamente, hay mucho desconocimiento sobre esta ley.
Entretots
Creo que es importante que la gente sepa que el vapeo sí está permitido en bares y restaurantes. Es verdad que cada bar o restaurante puede elegir si prohibir o no el vapeo, pero no hay ningún motivo científico o sanitario para prohibirlo, ya que numerosos estudios han demostrado que no existe el vapeador pasivo.
Por supuesto, como usuaria y exfumadora, sé que el vapor puede molestar a otras personas. Por eso, recomiendo a cualquiera que se haya visto en una situación parecida que lea el Código de Buenas Prácticas de la Federación Española de Hostelería y Restauración.
La inmensa mayoría de vapeadores sabemos que puede ser molesto y, si estamos importunando a alguien, no nos cuesta nada apagar nuestro cigarrillo electrónico. El tabaco ha sido y es una epidemia, y muchos de nosotros caímos en ella, algunos incluso sin poder escapar. El cigarrillo electrónico me salvó la vida y considero que es una buena herramienta para combatir el tabaquismo, por lo que estoy segura de que vapeadores y no vapeadores podemos convivir perfectamente.