El jueves 6 de febrero, en Sants Estació, me iba a Madrid con mi compañera a las 10.50 horas. Llegados al control, nos negaron la entrada porque los dos billetes de IRYO que entregamos llevaban el mismo nombre, el mío, y solo yo podía irme. Cuando compré los billetes, ella no estaba, y no sabía su DNI, no pensaba que el hecho de comprar los dos billetes a mi nombre comportaba consecuencias tan terribles.
Entretots
Teníamos que cambiar un billete poniéndolo a su nombre, pero no nos daba tiempo y al final tuvimos que comprar dos billetes de Renfe (121 euros). La empleada de Renfe nos dijo que, en el mismo caso, Renfe sí nos habría permitido viajar.