Hace unos días podíamos leer en 'El País' una carta que escribió Francesc de Carreras a Albert Rivera en la cual le decía todo lo que pensaba y pensamos muchos afiliados y simpatizantes de Ciudadanos.

En el 2016 me afilié al partido porque tanto su ideario como su presidente me transmitían un mensaje claro, correcto y sincero; pero quién diría que, tres años después, esa misma persona pactaría con la extrema derecha. Esos que siempre hemos criticado: los extremos. Ninguno es bueno, Albert.

Recuerdo que, en campañas pasadas, la gente nos insultaba, nos injuriaba, nos llamaban fachas y nosotros podíamos rebatirlos. Ahora ya no... ¡Ya no por los pactos con Vox! Y, ¿en Catalunya? En Catalunya hemos quedado huérfanos. Hemos perdido miles de votos y decenas de afiliados muy válidos para nuestro proyecto, y todo por lo mencionado arriba.

Y, ¿qué hacemos? Yo, querido Albert, me comprometo, junto con mis compañeros, a revertir toda esta situación desde Barcelona. Nuestra ciudad, donde nació todo. Donde nació el espíritu de Ciutadans. Pero necesitamos que lo hagamos todos juntos, desde la ejecutiva hasta las bases, porque recuerda nuestro primer lema: "mejor unidos".

Sólo añadir algo que ya te dijo Francesc: rectifica. Muchos no desean que a Cs les una sólo un melancólico recuerdo...