Alexa, Siri, Cortana… los conocemos por ser asistentes de voz, pero también tienen algo más en común en lo que quizás no hemos reparado: todos tienen voz de mujer. ¿Nos hemos parado a preguntar por qué? Los datos y los estudios son claros: porque se asocia lo femenino con lo servicial, agradable, y dócil. Y todos queremos un asistente dócil y servicial, ¿verdad?
Entretots
Ahora que la IA está a la orden del día y cada vez más se está haciendo presente e indispensable en nuestras vidas, a lo mejor es un buen momento para pararse a reflexionar sobre las siguientes cuestiones: ¿Debemos asignar género a una máquina? ¿Cómo podemos evitar perpetuar los estereotipos de género en la IA? ¿Qué herramientas tenemos los ciudadanos para exigir a las empresas una tecnología más igualitaria? La tecnología debería desarrollarse teniendo en cuenta los intereses y el beneficio de las personas, y no de un sistema productivo capitalista. De momento, los asistentes virtuales nos ayudan a programar citas, comprar con solo un comando de voz, optimizar nuestro tiempo de trabajo… ¿Nos está ayudando la IA a crear un mundo mejor y, sobre todo, libre de estereotipos sexistas?
Creo que nos encontramos en un punto de inflexión en nuestra sociedad y vale la pena reflexionar sobre todo ello.