Leo estupefacto que la película de superheroes de Marvel, Black panther, ha sido nominada al Óscar a la mejor película. Y digo estupefacto porque no alcanzo a ver los presuntos valores cinematográficos de dicha película, la cual, obviamente, he visto.

Vaya por delante de que a mi el género de superhéroes me encanta, a pesar de que reconozco de que hay cierta saturación de películas hechas en estos últimos años. Lo dicho, no veo los méritos cinematográficos de dicha cinta, una película entretenida, pero sin una puesta en escena remarcable, un guión que sorprenda o unas interpretaciones que resulten memorables.

Y puestos a comparar, opino que hay películas de superhéores que le dan mil patadas a esta, y que nunca van a tener tal reconocimiento. Pongo por ejemplo el Superman de Richard Donner, película seminal en el género y todo un clásico del cine.

O la para mi obra maestra del género, y del cine en general, El caballero oscuro, la segunda de la trilogía de Christopher Nolan dedicado a Batman.

Incluso me atrevo a reivindicar una película muy interesante e infravalorada como el Hulk de Ang Lee, como película mucho más interesante que este Black panther que han nominado a los Óscar.

¿La han nominado tal vez por corrección política? ¿Porque está protagonizada por un superhéroe de color?

Si es así, ¡mal vamos!

Se supone que hay que valorar el valor artístico de una obra, independientemente de si la ha hecho una persona de color o una mujer. A mi esto de la corrección política cada vez me gusta menos. La encuentro absurda e injusta, y no nos lleva a nada.

Y que conste que Spike Lee es uno de mis cineastas favoritos, y opino que ya debería tener un Óscar. O Antoine Fuqua.

En cuanto al tema de la igualdad de oportunidades en el acceso al arte por parte de personas de color o las mujeres, no creo que la solución sea nominar al Óscar una película mediana como Black panther.

Y sí, en cambio, a normalizar que haya actores de color o mujeres que protagonicen películas tipo Cosmopolis, de David Cronenberg. Ese papel que que interpretaba Robert Pattison, hecho por una mujer o un actor de color, ayudaría, en mi opinión, a normalizar mucho más que hacer la sempiterna película sobre racismo protagonizado por personas de color, o sobre machismo y maltrato por mujeres.

Un cine por otra parte necesario, sí, pero es que igual que de cine de superhéroes, también se hacen muchas de estas denominadas como "cine social", muchas veces de valores artísticos discutibles.