No hay partido con el que pueda estar más en desacuerdo que con Aliança catalana, ultraderechista y xenófobo; pero no hay que perder de vista un pequeño detalle: sus diputados fueron elegido democráticamente en las urnas, nos guste o no.
Entretots
Por tanto, quienes utilizando la violencia -como Arran y afines- impiden que puedan manifestarse o poner flores o lo que toque, se ponen a su misma altura: la del totalitarismo, la de la intransigencia dictatorial, la de usar la fuerza como única razón.
Por favor, lo que menos necesita en estos momentos Catalunya son los extremistas, sean del color que sean. Violencia, no. Convivencia, si.