Me pregunto qué sentido tiene aprobar leyes para que los menores no puedan consumir alcohol cuando nadie se preocupa de que se cumpla. Invito a todos a darse un paseo por cualquier fiesta popular, donde podrá ver sin problema corrillos de chavales alrededor de unas botellas o cómo muchos grupos llevan bolsas de plástico con botellas dentro. Me pregunto por qué nos oponemos tanto a ese consumo cuando este se realiza a la vista de todos, incluidos los padres de los participantes que paseen por la zona de fiesta. Alcohol que se ha robado de casa o comprado en tiendas que están abiertas por la noche y donde es fácil advertir en la puerta grupos de jóvenes que salen y entran del local bien provistos de bebidas.
Entretots
Nadie hace nada para que esos locales no puedan vender alcohol a menores, ni tampoco se hace nada para que dicho consumo se realice sin ningún problema a la vista de todos. Ningún policía inspecciona o pide documentación a los bebedores,... es la impunidad total. No es necesario, se asume que es parte de la fiesta el ver a menores bebidos, vomitando con más o menos discreción, críos para los cuales todo lo que ocurre en esa noche es alrededor de unas botellas.
Pero no nos engañemos y pensemos que toda la culpa es de la policía o las autoridades que no actúan. Esos menores llegan sistemáticamente cada fin de semana a casa con las evidentes muestras del consumo, y los padres miran para otro lado, porque no quieren advertir que están criando a unos borrachos.