Hace doce años, en septiembre del 2007, conocí por primera vez la medicina pública quirúrgica hospitalaria. Un infarto me trasladó de urgencia al Hospital Germans Trias i Pujol, en Can Ruti, Badalona. Aquellos días descubrí la excepcional atención de la UCI y del departamento de Cardiología del hospital.
Entretots
En octubre del 2010 inicié otro camino con el departamento de Oftalmología, durante meses, múltiples desprendimientos de retina pusieron al límite mi alma y la perseverancia de sus doctores. Certifiqué por segunda vez la excelencia.
Ahora, en este septiembre del 2019, un cáncer de próstata me ha llevado por tercera vez a Can Ruti para una prostatectomía radical cirugía robótica mediante el Da Vinci, que ha evidenciado la excelencia del equipo médico del servicio de Urología, puesto en valor la medicina pública y la innovación que nos rodea.
En la novena planta, el personal de enfermería desbordaba humanidad con su atención clínica y los goteros eran de ternura.