Vivimos rodeados de promesas vacías. El Gobierno anuncia avales para que los jóvenes podamos comprar una vivienda sin tener todos los ahorros. Suena bien. Pero cuando lo intentas de verdad, descubres que todo es mentira.
Entretots
Encontré un piso por 95.000 euros. Cumplía los requisitos del aval del Estado. Fui de banco en banco. Todos me decían lo mismo: "Eso no se está aplicando, es propaganda, nadie lo tramita". Algunos empleados ni sabían de qué les hablaba. La ayuda existe solo en los titulares, no en la vida real.
¿De qué sirve una medida que ningún banco quiere aplicar? ¿Por qué nos hacen perder el tiempo y la esperanza? Lo que debía ser una solución acaba siendo otra burla. Y mientras tanto, comprar es un privilegio y alquilar, una odisea. Nadie nos lo pone fácil.
Esta es mi experiencia, pero sé que no soy el único. Y si no lo denunciamos seguirán vendiendo humo. Todo es mentira y ya va siendo hora de decirlo claro.