Ya no hay razones ni excusas, ya no es importante quién empezó. Cuando ves que una barbarie como la que se está viviendo en Palestina e Israel se está cobrando miles de vidas inocentes, en un lado u otro, no importa en qué lado más, pues todas son vidas inocentes, ya no hay razón ninguna.
Entretots
Hamás sabía muy bien las consecuencias de su acto terrorista y el efecto que tendría en países vecinos. Netanyahu ha aprovechado la oportunidad de este acto terrorista para llevar a cabo su siniestro plan contra los palestinos. Hamás y Netanyahu les están haciendo mucho daño a sus pueblos.
Esta barbarie tiene que terminar y está en manos de los gobiernos democráticos el conseguirlo, aunque tristemente, el negocio de la guerra y la venta de armas son una buena fuente de ingresos para algunos países.
Israel, por ahora, es una democracia y en las próximas elecciones podrán decidir si Netanyahu debe seguir en el poder.