Estos últimos años ha proliferado la venta de equipos de sonido 'Home Cinema' y sus derivados, bajo la estrategia publicitaria de proporcionar un sonido envolvente, que puede ser muy sugestivo para quien lo disfruta, pero muy desagradable y molesto para los vecinos si no se instala en una habitación con el aislamiento adecuado. Como lo que hace el vecino que tengo y con quien comparto pared de forma egoísta y sin sentido del civismo.

En estos últimos tiempos ha habido mucha concienciación sobre lo que es la contaminación acústica y sus consecuencias, y los ayuntamientos lo han incorporado en sus ordenanzas de civismo municipales, aunque probablemente no le han dado la prioridad adecuada. Solo diré que el único día que he conseguido que la Guardia Urbana acudiera de las muchas veces que les he avisado por el excesivo volumen que ponían los vecinos, lo hicieron tres horas y media más tarde, cuando los vecinos ya se habían cansado de molestarnos y nosotros ya nos habíamos ido a dormir, con lo cual lo único que logramos es que la Guardia Urbana nos volviera a molestar por segunda vez.