Un adolescente de 17 años ha asesinado a tres niñas en el Reino Unido. Para algunos ya no es un adolescente sino un vil inmigrante que fue al Reino Unido para cometer fechorías, como la mayoría de inmigrantes, y llegan a esta conclusión porque los padres del chico son de Ruanda, aunque él nació en Gales.

Es un terrible asesinato y también es terrible que personas, grupos ultraderechistas utilicen este suceso para cargar contra los inmigrantes llenando la calle de miedo, odio, violencia, quemando hoteles que se han ofrecido para acoger, hiriendo a policías. Son personas, son grupos de ultraderecha que solamente ven la oportunidad de poder sacar ese odio, esa violencia, el ansia de destruir o de matar que llevan dentro.

No nos dejemos engañar por estos grupos, lo único que persiguen es crear un estado de terror.