Este país está gobernado por un puñado de jetas. Sé que esta afirmación puede estar un poco fuera de lugar desde el punto de vista de algunos bien intencionados políticos (que alguno habrá, digo yo). Pero viendo como algunos, sobre todo desde la derecha, cambian de partido y de convicciones para seguir cobrando del erario público para no tener que trabajar, como la mayoría de los curritos a los que creen que engañan día si y día también, me da que pensar que su único interés es pillar dinericos sin doblar el lomo. Entonces, me pregunto, ¿tan tontos o dormidos estamos como sociedad, o realmente hemos tirado la toalla?

Por favor, dirigentes, inviertan en educación el máximo de dinero público que tengan y enseñen a las nuevas generaciones a ser personas libres y autosuficientes, capaces de comprender que nadie puede dirigir sus vidas sin su aprobación, y que todo aquel que sea un servidor público debe tener como mínimo un grado de empatia con la ciudadanía y no ser un simple tartufo ávido de poder y dinero.