Las investigaciones y la justicia dictarán sentencia sobre Errejón. Yo, por mi parte, siempre estoy del lado de las víctimas. Si podemos sacar una enseñanza sobre este tema creo qué es la siguiente: un maltratador, un violador, un asesino no tiene que tener una apariencia determinada, el monstruo está escondido dentro de la persona, no vale la pena llevarse las manos a la cabeza al saber que ese señor tan culto y educado que te saluda siempre en la escalera y te sostiene la puerta del ascensor es, en realidad, un monstruo.

Lo mismo se puede decir de los políticos con una imagen ejemplar o abanderados de los derechos humanos. Una agresión sexual no tiene color político y la ley tiene qué actuar, aunque la verdad es que en este caso, con un político de izquierdas, salen más personas que en otras situaciones ponen en duda o culpabilizan a las víctimas y ahora están dispuestas a creer en las víctimas, las mujeres.

Mi apoyo a todas las mujeres que hayan sido víctimas de estos monstruos.