Es preocupante ver cómo muchas de las paradas de Bicing de Barcelona tienen un color muy rojo. Parecen un semáforo que no deja pasar a nadie con esos leds que indican que no hay bicis. Si solo fuera eso, no pasaría nada, pero es que, además de que casi nunca hay bicis en las paradas, en el caso de que haya una, está inhabilitada y no se puede utilizar: una luz intermitente entre el verde y el rojo, que nunca se apaga te impide cogerla, de modo que te vas como has llegado.

Normalmente, acostumbra a suceder fuera de las zonas donde se concentran la mayoría de las paradas. Pero, si existen estas paradas, es para que en ellas haya bicis y no para que estén vacías todo el día.